La
Cumbre Líderes por la Educación convocó a las mentes más brillantes que han
reflexionado sobre la educación en Colombia: Rodolfo Llinás, Moisés Wasserman y
Antanas Mockus. Llegó la hora de un pacto
nacional para formar a los colombianos del siglo XXI. Hay propuestas concretas.
El resultado en las pruebas Pisa conmovió a
Colombia y ha puesto a todos a discutir qué hacer para mejorar la educación en
el país. Un tema tan crucial para el futuro como trillado en el pasado: hace 20
años, una ‘comisión de sabios’ hizo prácticamente las mismas recomendaciones
que hoy sugieren los expertos. Semana Educación, junto con el Gimnasio Moderno,
acaban de convocar una cumbre, que sesionó en Bogotá el 29 y 30 de abril con
casi 800 asistentes de todas las orillas del sector, y presenta este informe
especial sobre cómo está la educación hoy en Colombia y qué hay que hacer para
ponerla en los primeros niveles mundiales.
Sí, los resultados de Pisa causaron revuelo. Lamentablemente, casi todo el mundo olvida que esta no es la primera vez que un examen internacional de educación sacude al país. En 1998, en la prueba Timms (Tercer Estudio Internacional de Matemáticas y Ciencia) los alumnos colombianos quedaron de penúltimos entre 41 países. Hubo, claro, gran preocupación, pero nada más. Desde 2006, cuando por primera vez el país se presentó a las Pisa, no se han logrado mejoras significativas.